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martes, 2 de septiembre de 2014

JUAN MAIDANA, un poeta verdaderamente popular


Escrita por el Dr. Tadeo Zarratea



Juan Maidana (Caraguatay, 10/07/1917 – Asunción, 15/12/1982) es un poeta verdaderamente popular no solamente por haber escrito a favor de los desposeídos sino porque efectivamente fue y vivió como desposeído durante toda su vida. Se destacó como poeta pero también fue dramaturgo y de alguna forma narrador, porque escribió una larga obra poética titulada Mitã rerahaha, a mi juicio su obra cumbre, estrictamente enmarcada en el género narrativo. Escribió exclusivamente en guaraní; que yo sepa, nada escribió en castellano.


Comenzó cultivando la poesía a edad muy temprana, según él mismo a los 13 años, y debió ser así porque sus primeros versos fueron publicados por “Ocára Poty Cue mí”, la más antigua y prestigiosa revista que divulgaba la poesía popular escrita en guaraní paraguayo en los años 30, y cuya gran parte pasó a formar el cancionero popular paraguayo. Más adelante publicaron sus poemas las revistas Ysyry, Eirete Ñu y otras.


Juan Maidana no llegó a publicar un poemario porque entonces no se estilaba. Los poetas populares publicaban sus poemas en forma colectiva y sólo a través de las revistas mencionadas, razón por la cual muchas de sus obras se hallan inéditas y por ende desconocidas. La única obra publicada por él mismo bajo los auspicios de la iglesia cristiana evangélica “Misión de Amistad” fue “Mitã rerahaha”, editada bajo la dirección de Rudi Torga, prologada por mí y presentada al público por Roberto A. Romero el 16 de mayo de 1980; obra que merece un comentario analítico.


Como poeta es uno de los más grandes artífices del idioma guaraní. En cuanto a la forma poética se ciñó estrictamente a la preceptiva literaria clásica; es decir, escribió siempre bajo formas españolas, con estrofa, métrica y rimas regulares. Su obra alcanza alto nivel poético por la profundidad de sus pensamientos, por el dominio absoluto del idioma y el manejo magistral de la técnica poética. Varios de sus poemas fueron musicalizados por destacados compositores como Emilio Bobadilla Cáceres, Agustín Barboza, Pedro Barboza y otros, y forman parte de los primeros versos del guaraní paraguayo grabados en discos.


Sus obras teatrales generalmente nombradas son:Chapetonía yma guare, Póra, Karai pyhare, Porayhu y Mba'éicha rupi orekuéra okaraygua. Esta última fue publicada póstumamente por la revista de la “Misión de Amistad” titulada: Ñande Reko Cuadernos de Literatura Popular, No. 3, en 1986. Las demás se hallan inéditas.


Mitã rerahaha. Es una obra escrita en versos octosílabos. Consta de 146 estrofas integradas a su vez por ocho versos cada una; se halla dividida en 28 capítulos y es enteramente narrativa, razón por la cual, por su argumento monotemático y su envergadura, en su momento la califiqué como: “La primera novela en guaraní”. Su estructura, aparentemente lineal, es sin embargo envolvente, porque hacia el final se produce un cambio de plano para volver a tiempos y episodios anteriores.




Quienes hemos conocido a Juan Maidana creemos que esta obra es en gran parte autobiográfica. En la misma, “Juanchí” el protagonista es un niño campesino, huérfano de madre y de padre irresponsable, por cuyas consecuencias sufre tantas peripecias que lo lleva a una frustración definitiva como persona. Aparece como victimaria la propia comunidad, indiferente, insensible ante los sufrimientos del más débil de sus miembros. Juanchí toma conocimiento, ya muy tarde y sólo en sueños, de las causas de su desgraciada vida. Le cuentan que fue originada en los errores cometidos por su madre, una mujer que, llevada por su excesivo orgullo y sus desmedidas ambiciones, escogió al peor de los hombres, el cual la abandonó embarazada; ella murió al traer al niño al mundo y lo dejó librado a su suerte. Criado por personas extrañas, Juanchí fue objeto de todos los abusos, ensayó los más diversos trabajos y llegó a la máxima degradación humana por causa de la pobreza material extrema, la falta de protección y de educación. Ya en la edad madura sus andrajos lo convirtió en “mitã rerahaha”, el viejo de la bolsa, supuesto raptor de niños. Su comunidad originaria, cuando ya no pudo servirse de sus fuerzas se sirvió de su espantoso aspecto personal, convirtiéndolo en instrumento de miedo para ejercer el gobierno de los niños. En vista de ello, emigró a la ciudad con su familia, se instaló en un barrio marginal donde sólo encontró mayor hostilidad. Allí empezó la reacción negativa de su mujer que, influenciada por amigas, lo presiona a su vez a que algo haga para escapar de la miseria. En su desesperación Juanchí crea ilusiones y se aferra a ellas para no sucumbir. Primero se propone hacerse compadre del “Tendota guasu”; luego, cae en la ferviente búsqueda de la “pláta yvyguy”, y así llega a los límites de su resistencia física.


Una tesis


De esta valiosa obra surgen conclusiones dignas de consideración sociológica y psicológica, tales como que: toda persona recibe de sus progenitores un conjunto de condiciones de vida al que podemos denominar “la herencia total”. Es la suma de los factores genético, cultural, de expectativas e ideales y de situaciones sociales y económicas. Ese conjunto de factores condiciona una suerte de predestinación de vida para cada persona por medio de complejos mecanismos. A esto se refiere el paraguayo cuando, esgrimiendo su fatalismo, dice: “el destino de cada uno”. Este mal llamado “destino”, si bien es un poderoso condicionante, no es nada misterioso porque las condiciones están a la vista; pero lo más importante es que no es atávico, porque toda persona en sí es un haz de posibilidades, una energía en potencia y por ende puede sobreponerse al mismo. El autor antes que negar este hecho, lo enfatiza. Una segunda aseveración encontrada en la obra es que el rol de los padres como educadores es insustituible.


Tres hechos


Independientemente de su obra, Juan Maidana me ha impactado con tres hechos: dos de su vida y otro acaecido ya en su muerte. El primero de ellos, la demostración de que las ideologías difícilmente se imponen a la cultura integral de la persona. Este poeta se reconocía a sí mismo como marxista-leninista, pero en esta obra sostiene un principio jesucristiano: alega que sólo el amor es capaz de redimir a la persona. El segundo ocurrió en el hospital de Clínicas donde fue internado a raíz de un accidente de tránsito, el arrollamiento del que fue víctima. Lo asistimos su hijo Abdón Maidana y yo. En un momento le pide a Abdón que mande a retirar el suero que estaba recibiendo, alegando que por esa vía, los esbirros de su archienemigo, el dictador Stroessner, le estaban suministrando veneno. Naturalmente Abdón se negó porque conocía la paranoia de la que sufría su padre; pero luego, cuando horas después se produce su deceso le escuchamos al enfermero decir mientras desconectaba los tubos del paciente: “Yo le advertí a los doctores que no se le puede suministrar suero glucosado a un diabético; tenía que ser suero fisiológico”. Como puede verse, Juan Maidana fue lúcido hasta el último minuto de su vida. Finalmente, durante su entierro, en el cementerio de Lambaré, nos faltó el cuarto hombre para trasportar el féretro, porque solo estábamos Abdón, el cochero y yo, razón por la cual tuvo que hacerlo mi esposa Margarita. Apenas ingresado al portón principal llegó el representante de Autores Paraguayo Asociados (APA), el poeta Carlos Sosa, quien reemplaza a la mujer pasando a oficiar ella de cortejo, pero no sola, porque allí apareció un muchacho adolescente, andrajoso, aparentemente especial, que llevaba una bolsa al hombro y nos acompañó. Al verlo le dije a Abdón: nos acompaña Juanchí, el personaje de tu padre. Él abrió desmesuradamente sus grandes y azulados ojos y comenzó a temblar. Finalizado el entierro lo buscamos al niño desconocido, pero ya había desaparecido del lugar. Así ingresó Juanchí al mundo de lo arcano, junto con su creador.


14 de febrero de 2012


Agredecemos por este aporte al Dr. Tadeo Zarratea
Tadeo Zarratea nació en Juty, Departamento de Ka'asapa, Paraguay, en 1946; es Abogado, Doctor en Ciencias Jurídicas y Licenciado en Lengua Guaraní. Alterna el ejercicio de la abogacía y la judicatura con la docencia, la literatura y la investigación de la lengua guaraní. Dedicó varios años a la defensa de los derechos de los indígenas, de los trabajadores y campesinos. Se desempeñó como catedrático de lengua y literatura guaraní en varias unidades académicas de las Universidades Nacional y Católica de Asunción, conservando en la actualidad la cátedra en el Instituto Superior de Teología de la U.C. Anteriormente se dedicó a la política en forma activa y ejerció sucesivamente los cargos de Convencional Constituyente, Asesor de la Vicepresidencia de la República, Senador de la Nación y Director Jurídico del Ministerio de Agricultura y Ganadería. Actualmente desempeña el cargo de Juez de Primera Instancia en lo Laboral en la ciudad capital, Asunción. En el campo literario optó por hacer literatura solamente en guaraní, como una prolongación de su opción preferencial de servicio a los más necesitados, decisión política asumida en su juventud.

domingo, 31 de agosto de 2014

Dr. Carlos Federico Abente - 100 años de un filántropo.




 Son muchas las cualidades positivas que se pueden tomar en cuenta a la hora de escribir sobre el Dr. Carlos Federico Abente; mi intención con estas líneas no es hacer  una descripción sobre su larga y vasta trayectoria como médico o poeta sino simplemente  hacer una reflexión sobre las enseñanzas de vida que desde mi óptica personal, han reflejado a lo largo de su camino como ser humano. El Dr. Abente es un filántropo y esa condición lo ha llevado a darnos ejemplos de solidaridad hacia sus semejantes, de entereza, y grandes gestos de amor hacía el género humano.

Partiendo desde esos gestos que parecen simples, como el hecho de haber tenido siempre la predisposición de abrir la puerta de su casa y recibir  a muchas personas que iban allí por diferentes razones y  entre ellos a muchos paraguayos que encontraron un refugio en situaciones adversas como es el caso de José Asunción Flores y muchos otros, él les brindó además su aliento y los acompañó para que pudieran desenvolverse y así continuar cada uno con su labor ya sea artística o no. El Paraguay, por decirlo de alguna forma, en ese entonces “expulsaba” a sus hijos ya sea por cuestiones políticas o de otra índole y el Dr. Abente los recibía, seguramente con esa frase que él acostumbraba: “Mi casa es la casa de todos los paraguayos”. Esa misma frase me la dijo en el año 2008 cuando fui a conocerlo. Eso refleja que a pesar de los años y de encontrarnos en un contexto político y social diferentes, él siempre mantuvo esa decisión de brindarse por completo sin vacilaciones y recibir a quien llamaba a su puerta con los brazos abiertos, con su corazón abierto. Como decía su amigo Sila Godoy, el Dr. Abente cumple cabalmente con la premisa existencial de ser en el mundo con los otros.  Por eso seguramente también a Augusto Roa Bastos le inspiró estas  palabras:
“Caballero querido, camarada,
porque me das la música y el eco…
y eres el agua por mi cauce seco,
dándome todo sin yo darte nada”;

“yo te conozco en todos los amigos,
porque el color de tu amistad les diste,
y en todos ellos tu presencia existe
como el color del sol sobre los trigos”.

Otra de sus características es la modestia y humildad, su frase muy conocida a la hora de referirse a sus obras poéticas es: “Yo no soy poeta, sólo escribo mensajes”. Escucharlo decir esto, conociendo la calidad y la maestría de su técnica de lenguaje en la poesía, le permite a uno llegar a comprender que es poeta no porque él lo diga, sino porque la misma poesía que escribe lo afirma y lo ratifica y se cumple el dicho que reza: “Es posible conocer el valor y el mérito de las personas a través de sus obras”.
La constancia y la perseverancia son dos cualidades que se ven reflejadas en la vida del Dr. Abente, a quien le ha tocado luchar por sus sueños, superarse y tener una vida plena.  Ejemplo de esto es estudiar y recibirse de médico en su juventud o fundar una asociación para proponer a las autoridades del Paraguay la declaración del día de la guarania a  pesar de su edad avanzada.
Los versos de Ñemity constituyen una gran metáfora y resumen en gran medida el pensamiento filosófico del Dr. Abente. En ellos se invita al hombre o al campesino a cultivar la tierra, esa tierra puede ser  una persona, una familia, una comunidad, un país, un mundo donde podemos sembrar semillas de amor, de fraternidad, de virtudes que enaltezcan la vida humana, que lleven hacia  la felicidad o como dice los mismos versos donde florezca el ideal, que haya el día de la redención, que renazca en la tierra el amor.
Son muchas las enseñanzas que podemos enumerar analizando la vida y las obras de Carlos Federico Abente y tomar como ejemplo para nuestras vidas algunas de esas enseñanzas sería el mejor homenaje a él.
Froilán Velázquez.

Bs. As. 31 de agosto de 2014

viernes, 29 de agosto de 2014

ORÍGENES DE LA GANADERÍA PARAGUAYA.


Puede decirse que la agricultura y la ganadería, aunque en distintas proporciones tuvieron simultáneo origen, en la metrópoli colonial. Pero mientras la primera se formó a base de los productos indígenas, que constituye todavía en gran parte el sólido alimento del pueblo paraguayo, la existencia ganadera se debió a los ejemplares provenientes de Europa, y su aparición en la Provincia data de la primera fundación de Buenos Aires.
El primer ganado existente en el Río de la Plata fue el caballar, que como es sabido vino con la expedición de Don Pedro de Mendoza. A pesar de las hondas investigaciones hechas acerca de ésta época, no se ha podido establecer, en forma definitiva el número de animales que arribaron entonces a las playas rioplatenses. SCHMIDELI dice que en esta expedición vinieron "72 caballos y yeguas", cifra cuya exactitud no ha sido comprobada  y en la que parece no incluye los caballos de guerra, pertenecientes a varios hidalgos y capitanes. Pero de cualquier modo, el ganado que trajo el Adelantado, lejos de prosperar, disminuyó bastante en medio de las calamidades que azotaban a los conquistadores. Y cuando se efectuó la despoblación de Buenos Aires, en 1541, los caballos y yeguas existentes en número de 44, según el cálculo más probable, fueron abandonados por sus dueños en los campos circunvecinos. Dicho ganado pertenecía, según un testigo que pudo apreciar, medio siglo después, su extraordinaria multiplicación " a la casta de Córdoba y Xerés de la Frontera".
 Aunque no falta historiador que atribuye a esa misma época la introducción de las primeras vacas al Río de la Plata, parece hoy fuera de duda la ausencia absoluta del ganado vacuno durante la primera ocupación de Buenos Aires. Las eruditas investigaciones que han comprobado este hecho, agregan que en la expedición de Mendoza tampoco vino ningún ganado menor; y en ese caso, la aparición del porcino antes del abandono de la ciudad, debió tener otra procedencia. La existencia de este ganado en el Río de la Plata está comprobada por la carta de Irala de 1541. Y de allí, sin duda, procedió el primer plantel de dichos animales en la ciudad de Asunción.
El primer ganado que hubo en el Paraguay fue así el porcino, pues los caballos y yeguas que vinieron en la expedición de Mendoza fueron, como ya dijimos, abandonados por los conquistadores en las pampas de Buenos Aires.
El cerdo representó como alimento un papel importante en las exploraciones, siendo su propagación fomentada por las autoridades no sólo en los pueblos sino en los lugares  de posible tránsito. Cuando se desplobó Buenos Aires, Irala dejó un casal de puercos en la Isla San Gabriel, con la recomendación escrita a los que llegasen "que no lo maten, y si hubieren muchos tomen lo que ha de menester y dejen muchos para casta".
El pequeño ganado fue abundante en Asunción, donde el conquistador lo tenía a mano dentro del corral de su casa, con sobrados recursos para su amntenimiento y procreación.
Pero no es cierto, como algunos creen, que ningún otro ganado existiera en Asunción hasta la introducción del vacuno, en 1542 a la capital paraguaya con la expedición de Alvar Núñes Cabeza de Vaca, una pequeña partida de potrillos y yeguas, que fue el origen de la riqueza caballar de esta parte de la provincia.
Las auridades intervinieron desde el principio, en la procreación del ganado señalando los animales que debían servir de padres, cuyos dueños cobraban por cada potrillo o potranca que hacía de la yegua la cuarta parte de su precio. Los mejores potrillos y yeguas pertenecían al Adelantado.
No hay noticia de que entoncces hubieran asnos en al país. En 1552 existía en Asunción una mula procedente del Perú, que pertenecía al Gobernador Irala, y adquirió después cierta notoriedad, como ejemplar único y cada cabalgadura predilecta del impetuoso obispo Latorre. En esta época hicieron su aparición las primeras ovejas y cabras, conducidas desde Charcas por el Capitán Nuflo de Chávez.
El ganado que más tardíamente se introdujo a Asunción fue el vacuno. Ateniendose a la ralción de Ruy Díaz de Guzmán, la primera partida - 7 vacas y 1 toro- fue traída del Brasil por dos hidalgos portugueses Scipión y Vicente Goes, que por ese tiempo se trasladaron al Paraguay en compañía de Juan de Salazar y Ruy, Díaz de Melgarejo. No sabemos sei ese fue el único ganado importado entonces al país; sólo se tiene constancia de que en el decenio siguiente las vacas no eran muy escasas entre los vecinos de la ciudad.
Pero la abundancia relativa del ganado pecuario correspondió a los años posteriores y fue debido a la introducción del que poseía Juan Ortíz de Zárate en el Alto Perú. Es sabido que una de las condiciones que dicho obtuvo del gobierno del Paraguay, fue la de meter en dicha Gobernación por la Provincia de las Charcas, donde tiene su casa y vecindad cuatro mil cabezas de vacas ,cuatro mil ovejas, caballos, yeguas y cabras. El nuevo Gobernador, que se dirigió a España con el fin de confirmar su nombramiento, encargó a su teniente, Felipe de Cáceres, la traslación del ganadoque se efectuó en 1568 por la vía da Santa Cruz de la Sierra y el Alto Paraguay. Junto con el ganado de Ortíz de Zárate venían también los de algunos conquistadores que regresaban a sus hogares, pero no se conoce el número total de animales que alcanzó a llegar a Asunción.

En el viaje lleno de incidentes que culminaron en la matanza de Itatin, con la muerte del infatigable Cháves, se perdió gran cantidad de vacas. Antes de llegar a Santa Cruz ya habían desaparecido 600; muchas otras se perdieron en el pasaje del río Paraguay; y los expedicionarios mismos corrieron grandes peligros, en que descollaron valor y la destreza del mestizo asunceno Juan de Salazar, hijo del fundador de la capital paraguaya. 

Materias tintóreas indígenas.


Es enorme la lista de materias, tanto del reino vegetal, como del mineral y animal, que suministran a los indigenas de estos paises los colorantes para sus tejidos, cerámica y otros trabajos manuales elaborados con todo sentido artístico.
A pesar de los colores sumamente vivos que se acostumbran para los objetos y la indumentaria rústica, esos tintes nunca chocan al buen gusto, gracias a su artística combinación. En ellos predominan el rojo y el amarillo, que parece fueran adaptaciones de los colores del pendón español importado por los conquistadores; pero el significado de éstos dos colores es una ráfaga artística que, juntamente con el negro y el blanco, proviene de restos de antiguas creencias guaraníes en relación simbólica con la muerte, la vida, la sabiduría y la virtud.
Para teñir los hilos se valen los indígenas de dos procedimientos: primero el hilo blanco se sumerge en el líquido colorante a fin de tener un color uniforme; para los jaspeados se cuentan cuidadosamente los hilos, se amarran firmemente en los intervalos definidos según el diseño y una vez sumergidos en la tinta, la parte amarrada queda del color natural del hilo.
Las materias tintóreas más usadas son las siguientes: la mora del campo para el color morado; el añil que da el azul; el jenipapo que tiñe de negro. También se emplea la fruta machucada del paraíso para obtener este último color. El amarillo se saca de una planta conocida con los nombres de pelo de leon o cabello de ángel.
El añil mezclado con palo amarillo de campeche da el color verde.
El palo del Brasil da un hermoso color rojo, así como la planta llamada sangre de dragón o sangre de chucho. El más usado es el achiote o bixiarellana, cuya fruta da un hermoso colorante. La cochinilla, animalito netamente americano, da también el carmín común.
Para afirmar los tintes se extrae el líquido del quebracho.
Para lavar las telas se emplea el jaborandí o jaboncillo, y para blanquearlas se usa la fruta del ingá.

Estas son , a grandes rasgos, las materias primas tintóreas más usadas; la mayor parte de ellas, paulatinamente, se van sustituyendo por anilinas importadas, más fáciles de usar.

Animales en la mitología y en la superstición.


Muchos pueblos de la antiguedad adoraban a los animales; los consagraban como dioses; simbolizaban con ellos hechos o fenómenos de la naturaleza y les atribuían poderes capaces de influir en la suerte del hombre.
Egipto, Roma y Grecia se destacaron por sus mitos zoólogicos. Los egipcios adoraban a un buey. Los romanos a la cabra de Amaltes, que amamantó a Júpiter, el padre de los dioses, y se había convertido en una estrella. Los griegos representaban las olas por medio de impetuosos caballos de crines flotantes.
Los guaraníes concibieron también animales fabulosos, que de uno u otro modo asomaban a la vida del hombre, sin que éste jamás los haya convertido en objetos de culto.



Mbói Tü'i

Teju Jagua

Los principales animales de la mitología guaranítica son: el jaguarú, el teju jagua,el apyitatá y el mbói tü'i.
El primero un morador de los lugares húmedos y oscuros, según la etimología de su nombre, era una mezcla de felino y anfibio, con cabeza de tapir. El último de su especie fue aniquilado en Yaguarón.
El teju jagua o Taragui, era un lagarto - tigre; igual que el escarabajo egipcio, tenía la misión de custodiar los tesoros de la naturaleza. Apareció sobre el margen del Paraná, levantando una piedra de cien codos de alto, el Ytapúa que un día se sumergió con mucho ruido; sus vestigios, unas rompientes de viva roca, conservan el nombre de teju kuaré. Se lo describía como un animal de ojos centelleantes, revestido de escamas replandecientes, ásperas y escabrosas. El hálito de su boca era mortal; su visión desconcertaba al hombre y hacía naufragar las embarcaciones.
El apyi - tata o aguaí -pytä, o ápice de fuego era amorfo y oscuro, una lumbre por cola u ojo y el don de revivir. El hombre que lo poseía podría afrontar los mayores peligros sin temor a la muerte.
Mbói jagua era un sepertón de dos cabezas, una de anfibio y otra de jaguar, devoraba al hombre.

Mbói tü'i: víbora con cabeza de cotorra parlera, revelaba los hechos ocultos y hacía de oráculo.

José Felix Estigarribia y la Masonería

Estigarribia fue masón como lo fueron otros grandes hombres que forjaron la historia del Paraguay como:

JUAN BAUTISTA GILL (masón) 1.840 – 1.877
Presidente Constitucional de la República del Paraguay (desde el 25 de noviembre de 1.874 al 12 de abril de 1.877)

CÁNDIDO BARREIRO ( 1.833 / 1.880 )
PRESIDENTE  ( MASÓN) DEL PARAGUAY. ( 24 NOVIEMBRE 1.878 AL 4 DE SETIEMBRE ( 1.880).
VICE – PRESIDENTE DEL PARAGUAY, (24 NOVIEMBRE 1.878 AL 4 DE SETIEMBRE 1.880 )


ADOLFO SAGUIER (masón)  1.830
Vicepresidente de la República
25 de noviembre al 4 de setiembre de 1.880


GENERAL DE DIVISIÓN BERNARDINO CABALLERO ( 1.839 – 1.912)
Presidente provisorio ( masón ) del Paraguay ( 1.880 – 1.882 ) tercer período complementario).
Presidente Constitucional del Paraguay ( 1.882 – 1.886 ) cuarto período Presidencial)
SR. JUAN ANTONIO JARA
(masón – Vicepresidente de la República, 25 de noviembre 1.882 al 25 de noviembre 1.886)

SR. JUAN G. GONZALEZ (1751/1912)
 Presidente masón del Paraguay (1751) (1893) desde el 25 de noviembre de 1890 al  9 de junio de 1893.

DR. CECILIO BÁEZ (1862/41)
Presidente masón de la República del Paraguay (9 de diciembre de 1905 al 25 de noviembre de 1906).

GENERAL Y DR. BENIGNO FERREIRA (1846 - 1920)
Presidente Constitucional y masón de la Rca. del Paraguay (desde el 25 de noviembre de 1906 al 4 de julio de 1908).

CIPRIANO IBAÑEZ (1878 - 1944)
ENCARGADO DE LA PRESIDENCIA DE LA REPUBLICA 1911

EDUARDO SCHAERER (1873 - 1941)
PRESIDENTE CONSTITUCIONAL Y MASON DE LA REPUBLICA DEL PARAGUAY
15 de agosto de 1912 al 15 de agosto de 1916.


José Félix Estigarribia se inició en la Respetable Logia PERFECTA ARMONIA de Concepción (Paraguay) el 7 de noviembre de 1914, a la edad de 26 años, soltero, paraguayo, teniente 1° de infantería, conjuntamente con otros compatriotas. El Supremo Consejo Gr. 33 del Paraguay le confirió el grado 18 Caballero Rosa Cruz, con el cual murió el 7 de setiembre de 1940 en un lugar llamado Yboty-Ñú (Altos), a los 52 años.

Estigarribia con atuendo masónico

Artículo masónico publicado tras la muerte de Estigarribia, en el mismo se lo ve con su atuendo masónico

¿Qué es la Masonería?

La Masonería es una Institución SECRETA, fundada a base de princi­pios sobre la LEY NATURAL, tal y como se encuentran determinados en los ANTIGUOS LIMITES; además lleva impresa una ca­racterística de antigüedad tan remota, e irradia sus enseñanzas de Filo­sofía Moral tan puras, que le aseguran a su Plan Progresista, una gran supremacía educativa a la colectividad Social, y con ese solo hecho, le queda asegurado el RESPETO y la VENERACION de todos los Pueblos Libres que existen sobre la Tierra.


Grandes masones universales:

José de San Martín, Manuel Belgrano, George Washington, Napoleón Bonaparte,  Sir Winston Leonard Spencer-Churchill, Victor Hugo. Pitágoras, Isaac Newton, Juan XXIII, Juan Pablo II, Franklin Roosevelt, Benito Juaréz, Rubén Darío,  Robert Baden - Powell, Rubén Darío, Simón Bolivar, José Martí, Cantinflas, Voltaire, y otros


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Los dos grandes partidos políticos del Paraguay fueron fundados por masones paralelamente iguales en 1.887:
El Partido Liberal y el Partido Colorado, hoy en función de Gobierno, y a cuya línea corresponde la proyección de Juan B. Gill, fueron fundados por los masones, cuya trayectoria personal en el curso próximo serán radiografiados.
Fundadores Masones del Partido Colorado: Gral. Div. Bernardino Caballero, José Segundo Decoud, Juan G. Gonzáles, Juan de la Cruz Jiménez, Lorenzo Ortellado, Juan Fernando Decoud, Antonio Recalde, Otoniel Peña, José Toribio Iturburu, Jaime Sosa, Juan José Iturburu.
Fundadores Masones del Partido Liberal en 1.887 son: Idelfonso Venegas, Simeón Irigoitia, Salvador Rivarola, Cecilio Báez, José María Frete, Daniel Candia, Fabio Queirolo, Antonio Taboada, José Zacarías Caminos, Víctor M. Soler, José Mateo Collar, Manuel A. Amarilla.-


Muerte del Mariscal Estigarribia:
Diagnósticos:
"Asunción, setiembre 11 de 1940 - Del Tte. Cnel. de sanidad Dr. Gerardo Buenguermini, Director General de la Sanidad Militar. D.S.D.M.
Al General Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas (E.M.G.), Gabinete-Cl. Asunción, N° 243.
Referencia: Embalsamiento.
Comunicó a ese Comando en Jefe, que en la noche del 7 de setiembre de 1940, practiqué, conjuntamente con los doctores Juan Boggino, Manuel Giagni, Roberto Olmedo, Tte. 2° de San. Ernesto Bejarano, los practicantes Homero Masi, Aníbal Espínola, Hiram Arias Cusmanich, Oscar Gould y enfermero Ramón Mendoza, el embalsamiento completo con formol, del Mcal. .losé Félix Estigarribia, de la señora Julia Miranda Cueto de Estigarribia y del mayor Carmelo Peralta, fallecidos ese día, a consecuencia de un trágico accidente en (Yboty-Ñu) ALTOS, quienes presentaban las sgtes. lesiones:

"Mariscal José Félix; Estigarribia".
"Herida penetrante de tórax, dirección transversal de más o menos 15 centímetros. Fractura expuesta de la pelvis rama isquio-puviana izquierda, con desgarro total del periné. Fractura expuesta doble de la pierna izquierda tercio superior. Luxación del codo izquierdo. Herida contusa que se extiende desde la espina iliaca antelo superior hasta el periné. Fractura expuesta del cuello quirúrgico del húmero izquierdo. Fractura cerrada del húmero derecho a nivel del cuello quirúrgico".

Señora Julia Miranda:
"Fractura del cráneo, región   frontal con desgarre de tegumentos frontales y de la cara. Fractura expuesta de la extremidad inferior del fémur derecho. Fractura doble conminuta del antebrazo izquierdo, tercio inferior. Fractura del hombro derecho, tercio medio. Fractura conminuta del maxilar inferior".

Mayor Carmelo Peralta:
"Fractura del cráneo y maxilar inferior. Fractura conminuta de la pelvis. Magullamiento de los miembros inferiores del periné con evisceración. Firmado: G. Buonguermini, Tte. Cnel. y Director de la Sanidad Militar".

Comunicado del Ministerio del interior:
"Con el más hondo pesar, comunica a la Nación que en un accidente de aviación de hoy perdieron la vida su Excelencia el Sr. Pdte. de la Rca., Gral. don José Félix Estigarribia y su esposa.
"Esta desaparición priva a la Rca. del más grande de sus hijos; y es necesario que el pueblo, haciendo honor a la memoria de nuestro glorioso Jefe, redoble sus propósitos de seguir las luminosas huellas de concordia y de engrandecimiento nacional por él señaladas Firmado: EDUARDO TORREANI VIERA, Ministro del Interior. Asunción, 7 de setiembre de 1940".



jueves, 28 de agosto de 2014

José Felix Estigarribia - UN CORDILLERANO DE ANCESTRO PARAGUAYO.

Junio de 1935, Puerto Merino: de izq a der, José Félix Estigarribia, comandante del ejército paraguayo, el gral. Rodolfo Martínez Pitta de la Comisión Militar Neutral y Enrique Peñaranda, comandante del ejército boliviano.
Firma del tratado de paz del Chaco, miembros de la delegación paraguaya enviados para convenir el tratado. De izquierda a derecha, Luis Alberto Riart, quien encabezó inicialmente el equipo negociador de su país; el general y futuro presidente José Félix Estigarribia, principal representante paraguayo en el tramo final de las discusiones; y el ministro de Asuntos Exteriores Cecilio Báez

Allí en el extremo Norte de la Cordillera, en el partido de Caraguatay, quizás el mas acentuadamente rural de toda la zona y poblado de agricultores paraguayos desde mas de un siglo antes, el 21 de febrero de 1888, hace 100 años y unos meses, nace, José Félix, hijo de Mateo Estigarribia y Casilda Insaurralde.

Tanto por la vía paterna, como materna, sus apellidos son vascos, pero de remotisima presencia en Paraguay.

Ya un Estigarribia había venido con el Veedor Alonso Cabrera, el que trajo la real provisión del 12 de setiembre de 1537, de tanta trascendencia en nuestro acaecer comunero, e Insaurraldes los hubo desde tiempos del adelantado Ortíz de Zárate y los hallamos en memorables jornadas del cabildo comunero de Asunción y de la independencia.

La infancia de este paraguayo por los cuatro costados trascurre en lo que por entonces se conoce como "la campaña".

Como tanta otra gente joven de todos los tiempos, José Félix Estigarribia viene a Asunción a ampliar horizonetes: ingresa a la Escuela Nacional de Agricultura, en Santísima Trinidad, y luego de aprobados los correspondientes estudios, recibe el título de Agrónomo.



 SU CARRERA MILITAR


Lo referido constituye sólo un hito en su marcha hacia el futuro. El destino de Estigarribia ha de ser muy otro.

En 1910 se incorpora al ejército: Es subteniente de Infantería.

Se están viviendo en el Paraguay los años del predominio en materia militar de Albino Jara, de breve y sangrienta trayectoria.

Estalla la revolución de Adolfo Riquelme. El teniente Estigarribia, de las fuerzas de gobierno, es herido en la acción de Bonete, y no participa de su cruento epílogo.

Becado a Chile, para una estada militar, se incorpora al regimiento "Buin", en el que afirma su formación.

A su regreso, recibe diversos destinos castrenses, en los que acredita su capacidad profesional y un alto sentido de la responsabilidad. Se gana, merecidamente, la consideración y el respeto de superiores y camaradas.

Sirve en la guarnición de Concepción. Allí se produce un grave hecho de sangre: un joven oficial, presa de ofuscación, da muerte al comandante de la Zona, a dos oficiales y a un cabo de guardia. Según una referencia verbal no confirmada, habria sido el Tte. Estigarribia quien -sin amenazas, ni violencia - logró desarmar al mencionado oficial y poner así fin a la trágica sucesión de acontecimientos. No puedo dar fe de su veracidad, pero refiero la anécdota porque resulta verosímil, muy propia del temple de Estigarribia.

También en Concepción, constituye él su familia: contrae matrimonio con Julia Miranda Cueto, su compañera en la bonanza y en el infortunio, en la vida y en la muerte.

MARISCAL JOSÉ FÉLIX ESTIGARRIBIA 



En 1910 ingresó al Ejército Nacional con el grado de Tte. 1º de Infantería, pues su verdadera vocación era la carrera de las armas. El 17 de Agosto de 1911 es enviado a Chile en misión de estudios.

Revistó en el Regimiento BUIN de Infantería en Santiago - Chile. Regresó al Paraguay y fue designado a prestar servicios en la I Zona Militar de Concepción.

Estigarribia, Oficial DEM en Francia el 13 de Noviembre de 1922 fue ascendido al grado de Mayor de Infantería.

El 3 de Noviembre de 1925 ingresó como alumno al curso de la Escuela Superior de Guerra de Francia. Dos años después ostentó el brevet de Oficial Diplomado de Estado Mayor.

Estigarribia regresa al Paraguay y es nombrado Subjefe del Estado Mayor del Ejército el 26 de Setiembre de 1927 y el 1 de Marzo de 1928 como Jefe del Estado Mayor General.

El 9 de Agosto de 1928 fue promovido al grado de TCnel. de Infantería.

Fue nombrado como segundo Comandante de la Fuerza del Ejército y Armada nacionales el 17 de Diciembre del mismo año y como Inspector General del Ejército el 29 de Diciembre de 1931, puesto que le permitió verificar el estado de indefensión del país.

Estigarribia en la Guerra del Chaco, el 17 de Junio de1932, sin perjuicio de sus funciones fue nombrado Comandante interino de la I D. 1 con asiento en Puerto Casado. A partir de ese momento comprendió Estigarribia que por fin llegaba la hora de cumplir su histórica misión, la reconquista del Chaco.

El 2 de Agosto de 1932, fue nombrado Comandante en Jefe de la I y II D. I. El 4 de Octubre del mismo año, el Gobierno le otorgó el ascenso a Cnel. de la Nación por méritos de guerra sobre el campo de batalla. El 28 de Abril de 1933, fue nombrado Comandante en Jefe del Ejército del Chaco y el 29 de Setiembre del mismo año el Gobierno le otorgó el grado de General de Brigada y el de de General de División el 13 de Diciembre.

El 16 de Setiembre de 1935, ya finalizada la guerra fue promovido al grado de General del Ejército y el 20 del mismo mes y año fue nombrado Comandante en Jefe de las FF.AA. de la Nación, cargo hasta entonces retenido por el Presidente de la República.

Fue electo para la primera magistratura el 15 de Agosto de 1939 y el 7 de Setiembre de 1940 en un accidente de aviación, termina la vida material del gran héroe del Chaco.

Por decreto Nº 2.984, de fecha 7 de Setiembre de 1940 se le confirió el ascenso póstumo al grado de Mariscal al extinto General de Ejército Don José Félix Estigarribia.

José Félix Estigarribia y el intelectual docente y periodista Justo P. Prieto

Anécdotas de la abuela...

Tengo el privilegio de tener en mis manos unos pequeños comentarios que mi abuela Graciela Estigarribia hizo de la vida del Mariscal en el año 1970, ella ya estaba ciega, mi mamá tenía que hacer un trabajo para el Colegio (6to curso) y Grand Mamam (como le decimos todos sus nietos) empezó la historia de la siguiente manera:

"Un pensador y poeta llamado Sabat Scart decía del Paraguay "es el pais mediterráneo donde entre relámpagos y sangre, sus grandes figuras son trágicas", y comentando este pensamiento, otro poeta, Fernán Silva Valdez habla del recibimiento que su tierra ofreció a José Félix Estigarribia:
"Entre relámpagos y truenos surge un héroe de la guerra, paladín de la paz, la tragedia griega del Chaco no le impide soñar con la mejor de las victorias, una paz justa, y en la cima de la gloria tiende a su diestra al adversario de ayer".
Mucho se ha hablado de la polifacética personalidad de Estigarribia, la historia militar lo eleva entre los grandes capitanes de América, y un Filósofo Americano llamado David H. Zook Jr. (pueden ver mas información en este blog); lo incluye entre los grandes generales del mundo.
Como guerrero, marca con su victoria, el fin del pleito chaqueño, que pesaba sobre siglos en el Paraguay, obtiene un doble triunfo como militar y embajador, asegurando con el tratado definitivo de paz, una era de prosperidad para su tierra.
Nació el 21 de febrero de 1888, cuando los bolivianos avanzaban audazmente por el chaco, hasta cerca de Villa Hayes, murió el 7 de setiembre de 1940, asegurando las fronteras del norte con Bolivia y las del Pilcomayo en otro tratado con la Argentina.
En medio siglo obtuvo para su tierra el respeto internacional y en lo interno consiguó la unión de los paraguayos en defensa de su heredad y, podemos afirmar, de la supervivencia del Paraguay. No pueden calcularse las consecuencisa para nuestra patria si la guerra del Chaco no hubiese sido una sucesión de victorias. El pueblo entero bajo el mando del Mariscal José Félix Estiagarribia, rubricó el derecho del Paraguay sobre el legendario territorio chaqueño, treintamil vidas jóvenes fueron el precio de la gloria.
Estigarribia, así, sin títulos es en su esparatana grandeza, una figura subyugante. Desde su juventud, un estudiante ansioso de saber, formado por grandes maestros como Gondra, Cecilio Báez, Viriato Diaz Pérez, opta por la carrera de las armas, donde contaba con varios ascendientes muertos en el Holocausto de Cerro Corá. Se le atribuye al joven teniente haber dicho: "Respetemos nuestro pasado histórico, mas no lloremos tanto y pensemos alguna vez en la victoria".
Era a su regreso de Chile, cuando obtuvo la medalla de oro de su promoción y volvió, no solamente con su diploma, sino con cinco grandes cajones de libros humanísticos y cinco de tópicos militares.
Macedo Suárez, canciller de Brasil con quien hizo gran amistad en Europa, donde el brasileño comenzaba su carrera diplomática y nuestro héroe ingresaba en la Escuela Superior de Guerra, comentaba lo siguiente: "El joven rubio, modesto, callado, pero que tenía el raro don entre sudamericanos de imponer sin quererlo, sus modales refinados sorprendían a los franceses, su vasta cultura a los americanos y sus notas brillantes a sus entonces compañeros de armas".
De Europa regresó con el "Brevet dÉtat major" (Brevet de Estado Mayor) y habiendo recorrido los principales países europeos, trajo la certeza de que Bolivia se armaba para agredir al Paraguay.